Un estudio que incluye un rastreo sobre motivaciones y comportamientos cambiantes de los consumidores de Estados Unidos, realizado por Sustainable Brands, ha arrojado que las ecoetiquetas son parte de la prioridad de los clientes.
A través de esta investigación colaborativa, las distintas marcas que componen SB Brands for Good utilizan los datos recabados para enmarcar sus estrategias y mensajes en relación con las conductas, actitudes y opiniones de los consumidores.
Consumidores más ecológicos
El resultado de una encuesta realizada con mil estadounidenses, enfocado en las tendencias socioculturales, arrojó un desarrollo importante en la adopción de estilos de vida sostenibles. También evaluó el nivel de importancia que tienen las acciones sostenibles a partir de la pandemia y la influencia de las etiquetas en las decisiones de compra.
Al preguntar sobre 9 comportamientos sostenibles, los encuestados tendieron a dar prioridad a las que ya están siendo consideradas en la sociedad, como el reciclaje, la conservación de la energía, el uso de menos productos desechables y la minimización del desperdicio de alimentos y agua.
Al cuantificar otros temas relacionados con parte de la familia, los hijos y el trabajo, los encuestados están inclinados a sostener que ser sostenibles puede tener un impacto positivo en la sociedad y ayuda a tomar decisiones conscientes del medio ambiente, es decir, se le da el mismo nivel general de importancia que otras actividades cotidianas, como mantener una rutina de ejercicios y mejoras en el hogar. La preferencia más alta es tener tiempo para sí mismos: el 46% señaló que esto se ha convertido en fundamental desde el inicio de la pandemia.
Por otra parte, para comprender mejor cómo priorizan los consumidores estadounidenses la sostenibilidad, el estudio les mostró una selección de logotipos relacionados con el cuidado ambiental que suelen estar presentes en los envases.
Se les solicitó que clasificaran los logos por orden de importancia al considerar la compra de un producto doméstico (en este caso fue un detergente), uno electrónico (como un mouse de computadora) y un alimenticio (un nuevo dip).
Entre las respuestas obtenidas, la marca de envase fabricado con materiales reciclados estaba primera en la lista de motivaciones para la compra. En cuanto a la compra de un snack, los principales motivadores fueron las certificaciones como Rainforest Alliance y Fair Trade Certified.
Comprender los comportamientos, como las intenciones y acciones de los clientes hacia estilos de vida sostenibles es un paso fundamental para las empresas. Esta información son la base para elaborar campañas impactantes que impulsen el cambio de comportamiento del consumidor sostenible de forma accesible, inspiradora y gratificante.
