La cultura del reciclaje ya se ha instalado en la mayoría de los hogares de los españoles. El 82% de los españoles afirma reciclar de manera habitual, según los datos arrojados por el último estudio de investigación realizado por el Instituto Apolda.
Sin embargo, aún debe implantarse a nivel empresarial e industrial, ya según datos proporcionados por el INE, por sectores el 83,5% de los residuos generados en 2018 corresponde a áreas de actividad (empresarial e industrial).
Con el modelo actual de fabricar, usar y tirar en vías de extinción, la industria encontró en la economía circular un gran aliado para la gestión de residuos.
Este modelo de producción y consumo transforma los residuos en recursos nuevos para darles otra vida útil, eliminando el concepto de residuo de la ecuación.
Cleanity ha puesto el foco en desarrollar el área de Cleanity Recycling, para ofrecer soluciones a la industria que trabaja con residuos peligrosos.
La compañía ha inaugurado recientemente una nueva planta en Buñol con una superficie total de 8.650 m2 y una superficie cubierta de 700 m2 destinados a residuos peligrosos y 750 m2 destinados a residuos no peligrosos, multiplicando así la capacidad de gestión de residuos.
Desde las instituciones también se están llevando a cabo acciones para impulsar conductas que reduzcan los residuos y aumenten la tasa de reciclado.
En relación con esto último, el proyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados reemplazará a la vigente ley de 2011, cuyo objetivo será cumplir con las nuevas orientaciones y los nuevos objetivos de residuos establecidos en las directivas de la Unión Europea que conforman el paquete de economía circular, para lograr disminuir en 2030, un 15% de los residuos generados en 2010.